Hoy fue cumpleaños del más pequeño de mis sobrinos, desde que entré a la casa me recibió corriendo agitando sus manitas y gritando que era su fiesta de cumpleaños solicitando abrazos.
Los regalos fueron emocionantes pero no lo más importante y es que le daba más alegria verse rodeado de tanta gente que lo queria de verdad.
Me quedé pensando que conforme vamos creciendo nos vamos olvidando de las cosas que de verdad importan.
Sobre todo que los años no deberían de pesarnos tanto cada que celebramos nuestro día si hemos vivido lo que hemos querido y sabiendo que tenemos la oportunidad de seguirlo haciendo.
jueves, 14 de mayo de 2009
domingo, 3 de mayo de 2009
Unos dias lejos de la ciudad
Mis silencios dicen mucho más de lo que creo, palabras, emociones y deseos que intento guardar en los cajones de mi cómoda pero de tantos comienzan a desbordarse.
Luego me voy inundando de todas esas actividades diarias que prolongan los silencios, pero no por eso dejan de decir tantas cosas.
Acabo de regresar de unos días lejos de la ciudad, con mis parientes, con un par de amigos y llego para estar unas horas más con otros amigos para contarles cómo me fue y les cuento todo lo que hice pero nunca les cuento todo lo que pensé, porque siempre me las ingenio para escaparme unos segundos, minutos, pero no horas para sumergirme en mis pensamientos que se revuelven y se desbordan como en mis cajones.
No se porque me siguen naciendo un par de culpas que me remuerden luego cuando estoy haciendo algo que me pone contenta y me hacen sentir un poco mala persona, no puedo negar que me da por pensar en él que siempre ha tenido un lugar en mis pensamientos y mis sentimientos y cavilo mucho en lo que siento aquí dentro y lo que va a pasar en el futuro (Últimamente me da por pensar mucho en él) y también en esas cosas inconclusas que dejé con otra persona más que sigue rondandome de cerca, ese que nunca logró tocarme aquí dentro donde los sentimientos se estrellan como olas en la roca.
Yo sé que todo nace de un temor que tengo muy arraigado y que me hace plantar minas bajo el suelo intentando sabotear esos castillos de arena que comienzan a ser construidos y que la mayoria de las veces termino pisando yo misma.
Esta vez intenté no pensar mucho, dejaba inconclusos los pensamientos para solamente hacer lo que tenia que hacer, relajarme.
Mañana podré comenzar a aprender a plantar raices en vez de minas.
Luego me voy inundando de todas esas actividades diarias que prolongan los silencios, pero no por eso dejan de decir tantas cosas.
Acabo de regresar de unos días lejos de la ciudad, con mis parientes, con un par de amigos y llego para estar unas horas más con otros amigos para contarles cómo me fue y les cuento todo lo que hice pero nunca les cuento todo lo que pensé, porque siempre me las ingenio para escaparme unos segundos, minutos, pero no horas para sumergirme en mis pensamientos que se revuelven y se desbordan como en mis cajones.
No se porque me siguen naciendo un par de culpas que me remuerden luego cuando estoy haciendo algo que me pone contenta y me hacen sentir un poco mala persona, no puedo negar que me da por pensar en él que siempre ha tenido un lugar en mis pensamientos y mis sentimientos y cavilo mucho en lo que siento aquí dentro y lo que va a pasar en el futuro (Últimamente me da por pensar mucho en él) y también en esas cosas inconclusas que dejé con otra persona más que sigue rondandome de cerca, ese que nunca logró tocarme aquí dentro donde los sentimientos se estrellan como olas en la roca.
Yo sé que todo nace de un temor que tengo muy arraigado y que me hace plantar minas bajo el suelo intentando sabotear esos castillos de arena que comienzan a ser construidos y que la mayoria de las veces termino pisando yo misma.
Esta vez intenté no pensar mucho, dejaba inconclusos los pensamientos para solamente hacer lo que tenia que hacer, relajarme.
Mañana podré comenzar a aprender a plantar raices en vez de minas.
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